jueves, 29 de enero de 2009

La dictadura de los enanos



















En estos tiempos, que cada vez la gente es más alta, resulta increible que el mundo no se adapte a ello. Yo mido 1,98 m, y dentro de poco, seré un bajito, dado que estoy viendo los chavales que salen de los institutos, y ya hay mucho que me saca un palmo. Si yo lo tengo dificil para encontrar calzado, ¿cómo se lo harán ellos?
Ayer, triste día el de ayer, me fui a comprar unas botas... de esquí. Pues bien, el modelo más grande que tenían, era un 30, es decir, un 45 de calzado normal, más o menos. Y eso, en la tercera tienda, en las dos anteriores (grandes almacenes), ni eso.
Y la gente, no piensa. Si ahora somos euro-p-2, y al número antiguo hay que sumarle uno, resulta quue la gente que gastaba un 45, ahora gasta un 46. Pero las tiendas, siguen trayendo hasta el 45, el nuevo, es decir, el 44 antiguo. Ala, unos cuantos descalzos más.
Y como estas, muchas otras contradicciones.
Si la gente cada vez es más alta, que alguien me de respuesta a:
-¿Porqué los aviones, tienen las plazas cada día más apretadas? ¿No es peligroso para todos?
-¿Porqué las barras de seguridad/agarraderos de los autobuses, ahora se colocan más bajas? ¿Y quién es el genio que las coloca en las salidas, cuándo nunca se hizo? <- SI, me he dado unos cuantos zurriburrios contra ellas.
Ahí lo dejo.

jueves, 22 de enero de 2009

Allí dónde se cruzan los caminos...

Allí dónde se cruzan los caminos
donde el mar no se puede concebir
donde regresa siempre el fugitivo
pongamos que hablo... de Madrid.

Quién diría que después de tanto tiempo sin actualizar mi blog, lo haría desde un hotel de esta ciudad, que ya no és lo que era, para bien y para mal.

Para bien, porque las últimas veces que estuve en la capital, el puticlub estaba montado al aire libre, en plena Gran Via, cerca de la plaza Callao. Se ve que Gallardon, Espe, o alguno de sus correligionarios en el ayuntamiento, se ha marcado como propósito de año nuevo (de este, o del anterior), acabar con dicho espectá-culo, que era realmente desagradable, porque además, o eran muy feas, o tan feos como Carmen de Mairena (dijérase que se aproximaban a una mujer.... pero sin especificar el tipo de aproximación).

Para mal, porque hay cosas que el tiempo cambia. "Cualquier tiempo pasado fue mejor", que diría Jorge Manrique, aunque tampoco vamos a ser nostálgicos gratuitos. Sencillamente, uno guarda depende que recuerdos agradables, y viene la carrera del tiempo, y los desvencija.

Uno de estos recuerdos que tenía yo de Madrid, era el Museo del Prado. Por si no lo sabeis, no habeis estado, o no lo quereis ver (pobres locos), se trata, posiblemente, de la mayor colección pictórica del mundo. Allí dentro puedes encontrar de todo: Tiziano, Sorolla, Rafael (sí, el que da nombre a una tortuga Ninja de esas), El Greco (no me pidais que escriba el nombre), Goya, un larguísimo etcetera, con pintores flamencos de regalo, y por supesto, Velázquez.
Nunca he sido un "loco" de la pintura, pero he de decir que ver tanto, y tan bueno, junto, es emocionante.




























Uno no puede evitar verse sobrecogido al ver la rendición de Breda, con la clemencia de Spinosa, que casi parece que le esté diciendo al flamenco de turno algo así como "nada hombre, anda, que os hemos ganao, pero vente a tomar unas cañas".







































O sentirse dentro de la habitación, donde un pintor, caballero de la orden de Santiago, comparte escena con unas niñas de alta cuna, unas meninas. ¡Qué profundidad!

Esa forja, con fuejo vivo, que casi notas el calor, con ese hombre, un tal Vulcano, que viene un tipo con un sombrero alado, un pocoo friki, Hermes se llama, y más o menos le dice "yo tengo alas en la cabeza... tú, cuernos".

La ira, el resquemor, el ánimo de venganza, que seguro que despertó Goya al dia siguiente, con los fusilamientos, que ahora discuten si fué o no en Principe Pio. Cuadro de pocos trazos, apenas sin detalles, pero con una carga emotiva inmensa.

Todo esto, y mucho más, está en ese edificio del Paseo de la Castellana. Y cuando yo lo visité la última vez, todavía se poodía fotografiar libremente. Era patrimonio de todos. Pero por culpa de unos imbeciles, que siempre tiene que haber por desgracia, ahora las reglas del juego han cambiado. Todo, porque hay gente que no sabe usar su cámara de fotos, y hacer fotos sin flash. Así que, cómo no se puede controlar la gente que hace fotos con o sin flash, antes de que la hagan, todo el mundo a jorobarse.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Volviendo a los origenes


En breve, volveré a orientar este blog hacia lo que era mi idea original: el blog de un electrofriki. Y para empezar, algunas chorradas básicas, de robótica elemental(mente) casera, como una estructura de robot en torno a cuatro piezas de meccano, y basada en microcontroladores de gama media (PIC16F84A, en nuestro caso).
Y las consecuentes aplicaciones clásicas: seguidor, guardián, etc.
Quizás, más adelante alguna aplicación basada en bluetooth, o algún otro enlace sin hilos, como ZigBee.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

De vuelta a la p... realidad


Ya estamos de vuelta. Hemos dejado a Dorothy en el país de las maravillas, y ya estamos otra vez sumergidos en la rutina. Vuelta a las clases, el trabajo, los compañeros, las compañeras, los proyectistas, los pesaos, los profesores que tardan en colgar las notas de los exámenes parciales, las correspondientes discusiones fruto de la tensión que se respira al llegar a la ciudad, los ensayos para el próximo concierto en mente, la ilusión de ver que todo va llegando a buen puerto, los imbéciles (con blog o sin el), etc.
Pero qué bien que estábamos en Asturias... incluso el tiempo era mejor. Tenía más frío esta mañana con el abrigo, que hace unos días en mangas de camisa por Candás. En parte es por el temporal, pero por otro lado, la humedad de aquí es diferente de la de Asturias (y eso que estaba lloviendo, y estábamos al lado del mar).
Pero que se le va a hacer, ya hemos vuelto.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Ya estamos en el paraiso


Por fin, después de una semana interminable, por fin hemos llegado a Asturias. Pasado el tiempo correspondiente de aclimatación (es decir, el que hemos dedicado a recuperar sueño), llego la hora de empezar a disfrutar de la gastronomía, del buen tiempo (está lloviendo "asturian style"), y de todo lo que esta tierra que tanto quiero, tenga a bien ponernos por delante.

martes, 11 de noviembre de 2008

Más paradojas de la tecnología en torno al hombre


Después de un mes, aquí estamos. Perdonad la tardanza, pero es que he estado un poco liado, por no decir bastante. Entremos en materia.

A ver, es solo una pregunta lanzada al aire, pero ¿alguien sería capaz de explicarme, porqué la gente grita cuando habla por un walkie-talkie? Es algo que me ronda la cabeza, desde hace tiempo.
Para empezar los walkies estos de los seguratas, por ejemplo, suelen ser de banda ciudadana. Sea como sea, tienen la potencia limitada, para que las ondas de sus comentarios sobre lo buenorra que está la recepcionista de la empresa no lleguen a los seguratas de otra empresa... porque sino, se vienen a verlo.

Y de hecho, no hace falta que tengan el walkie encendido, porque aunque esté apagado, el sonido se propaga por el aire peor que por cualquier líquido o solido, pero no tan mal como para que el pedazo de berrido que pega el andoba no llegue en forma de eco a Cangas del Poo. Y todos los paisanos de Cangas del Poo, y alguna paisana (de esas que en Cangas llaman bolleras, porque lesbiana... ¿y ezo qué é?), delante de la empresa pa ver lo güenorra que está la recepcionista.


Lo grandioso del caso, es que en el manual del artilugio, pone algo así como "wan ninxillin ta plikitilin", que traducido del chino significa "hable con normalidad". Y el preclaro usuario, exponente máximo del razocinio, habla con normalidad... con la normalidad con la que hablaba al rebaño cuando el sol se ponia:
-Brrrrr, pa! Lucerá!!! Ruscu, jaaau, volta dreta!!!
Que pasa, es que veraneaba en Salou.

lunes, 6 de octubre de 2008

El heroe de Mallorca


Estas líneas, van con especial cariño, con el reconocimiento y el agradecimiento de un sportinguista, hacia el mejor jugador alineado en el último partido de los rojiblancos.
Este hombre, Iván Cuellar "Pichu", tras un encontronazo con el jugador del xoriguer Webo, tuvieron que zurzirle ocho puntos en el campo. Posteriormente, le pusieron un turbante de vendas, con el que continuó jugando hasta el final del partido.
Lo asombroso, está por venir. Encomiable, y digno de toda clase de admiración, es que tras recibir el zapatostio de Webo, y caer al suelo con la herida sangrante, su única preocupación era coger el balón. Esto es un jugador comprometido con su equipo. Desde Barcelona, un sportinguista de a pié, le agradece lo que hizo en la cancha rival.

Por cierto, me importa un Webo lo que diga algún carbayón faltosu. Saludos a todos ellos, en tercera. Ánimo, que ya mismo llegais a primera.